miércoles, 23 de diciembre de 2015

Plan en Laponia.

Por fin estamos en invierno. El 21 de Diciembre, el lunes a las 10:44 llegó. Esto de saber hasta la hora que entran las estaciones, me tiene matá del tó.

¿Verdad que apetece ver nieve a estas alturas del cuento?


Vivo en unos parajes de la repanocha.


No nos lo podíamos perder. Yo nunca había visto algo así.


Las farolas eran alucinantes.


Que en Madrid no hay olas es cierto, pero hasta que empezamos a tener viento tan a lo loco que llena los puentes, y si hace frío parece que andamos en pleno Ártico.



Me llama el Pichu y me dice, sal pronto, tengo una sorpre. Me cierra los ojos, me planta mis botas de agua y un abrigo y me dice, te llevo a un sitio que no has visto nunca.


Me encanta lo de ir a sitios sin saber, sitios porque sí, sin esperar nada.


Toda una postal totalmente Navideña.


Flipante.


Molaba todo.


Hugo nunca había visto esas espadas de hielo, parecía que estábamos en Frozen, sin muñeco de nieve porque sólo era hielo.


A lucharrrrrr. Oh, me has roto la espada, menos mal que teníamos millones.

Y son como colmillos.

¿Y esto, por  qué? Hugo no para de preguntar cómo estaba eso así, si por la mañana estaba normal. ¡Que era imposible!


Empezaba a llegar mucha gente.


Pero nos daba igual.


Precioso,  ¿verdad?


Es Madrid. Son mis parajes, es mi agua. Son mis puentes. Mis otros puentes.


A 30 minutos del centro de la Capital.


El cuento que le conté a Hugo era sencillo, es Papa Noél el que hace esto con el tiempo.


Así el trineo y los Renos pueden pasar fenomenal.


Sin hielo no saben por dónde ir.


Achuchos, que hace frío.


Hugo, no corras que me caigo por seguirte, jajajjaja.


Y claro, me caí. Qué patosa "mardremía".


De verdad que era alucinante, era como estar en la era glacial buscando un Mamut.


Un pasote.


Qué alucinante lo del agua y el frío, ¡eh!


Daban ganas de decir, Carámbanos jajajajjajjaa


Pasamos justo a tiempo, antes de que llegara la autoridad a prohibir el paso.


Era una gozada verlo todo heladito y luego la excusa perfecta, para volver a casa y un chocolate calentito después de un buen baño todos juntos.


Que le vamos a hacer, disfrutones de todo. No necesitamos demasiado


Puedes ir a un centro comercial, puedes ver la vida desde el sofá, desde el móvil, ponerles la tele,..., pero es mejor vivir un poco, de verdad.


Disfruta.



Siente.



Mañana Nochebuena, parece mentira. ¿También te la vas a perder?



Luna.

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