Siempre os contamos nuestras Cosas cíclicas. En estas fechas, como cada año desde antes de conoceros, nos vamos a Aranjuez, a la carrera tradicional.
Cara que se te queda cuando sabes que no vas a ganar, que alguna gente entrena y es muy pro.
Mi sobri grande quedó fenomenal.
Somos una familia de vigoréxicos. Bueno, a quién quiero engañar, solo ellos, nosotros somos más de fabada y cachopo. Jajaja.
Aquí me véis haciendo respiraciones y dando consejos. Me sentía como Kake, que es nuestro amigo que entiende y que intentó que yo fuera una chica sana.
Mi sobri peque no quería dejar a su madre correr; qué listo, sabía que tenía que quedarse conmigo.Que para eso soy su madrina. Es de las cosas que más ilusión me han hecho en la vida, se me llena la boca cuando digo Ahijaú.
Cada uno corría en su grupo.
Sentí que ganaba y su padre, en su máxima humildad, no lo quería reconocer, que podía ser que llegara la primer. Sólo sabía decirme, que no mujer, que no.
Yo he sido siempre muy competitiva, pero mucho. Quizás por eso no me gusta correr, porque no estoy preparada ni me veo buena.
No entiendo que siempre se denoste la competitividad y se fomente el grupo, si alguien es bueno y destaca, no tenemos que hacerle sentir mal, ni siempre parte del rebaño, puede ser un gran perro guía.
Y entiendo que todo el mundo diga ¨lo importante es participar". Pues lo siento, yo digo, sí genial, participar mola, pero ganar, ganar es, la releche (ya sabéis que no me deja Consejero Delegado decir tacos).
Hoy el post va dedicado un poco a ella, a Paula, porque me dió un alegrón tremendo.
Lo dió todo. Empezó adelantando, siguió y...
Bueno, para eso su primo. Jajaja.
Lo importante es llegar, dice.
Así de atléticos somos.
También lo dió todo.
Este es el ritmo Hugo, ralentizado.
Si es que sale a padre. Juas.
Pero es que la campeona realmente fue ella.
Campeonaaaaaa. Oe, oe oeeeeeee.
El último que corrió fue Lucas.
Nosotros con nuestro premio, bolsa con regalitos varios (isostar, barritas energéticas,...), ya eramos felices cual codornices.
Pero yo seguía orgulloso de ella.
Soy su tía, soy su tía.
Si es que me hizo más ilusión que a ella.
Ella no era consciente de que lo iba a conseguir, pero yo desde que salió ya saltaba. Si me quedé hasta afónica de los gritos y tenía agujetas al día siguiente de los saltos que daba. Vale, soy una floja y por eso también.
Con las mayores me meo de risa, son tan geniales. Y me imagino que estaríamos despotricando del cuadro que les dieron. Si es que al lumbreras que se le ocurrió dar un cuadro como premio...
Creo que les decía que al próximo año íbamos a entrenar para ganar nosotras.
Ya podían haberles dado un coche en vez del cartelillo ese, ¿no?
Estamos aterrados, este año volverá a ganar y le darán un póster.
No estamos mucho juntos, así que aprovecho para que me cuenten cosas al máximo.
Paso mucho de sus padres, cuando estoy con ellos. Soy así de maja. Pero los prefiero a ellos, me encantan.
Luquitas es tan mono.
El evento tiene mucho tirón y se pone hasta arriba, por eso has de llegar con tiempo para recoger dorsales y demás.
Mientras corren los mayores, nosotros nos vamos con la Jauría.
Y luego nos tomamos un colacao calentito antes de ir a comer.
¿No me digáis que habéis notado el spam de los Gorros de flores de tela, de Algodón de Luna en este post? Jeje.
Ves pasar a las gente por los jardines.
A los renos, que son fechas.
Nosotros por no ver, no vemos ni la carrera.
Cómo nos gusta rebozarnos. Básicamente es lo que hace todo el día.
Aquí con su primo Nico, que además la próxima semana se viene a dormir y Hugo está que no se lo cree.
Algún día, uno acabará con una piedra en toda la cabeza.
Sólo espero, que no sea este año.
Estas guerras también las repetimos año tras año y son geniales.
Un día a alguno lo perdemos entre tanta hoja.
Después de comer en el Restaurante de siempre de Aranjuez.
Es verdad que son chorradas, pero son nuestras chorradas y somos unos disfrutones.
El momento "Pato" les encanta.
Nunca llevamos suficiente pan.
Eso de no tirar todo el pan de golpe e ir poco a poco es misión imposible.
Todos los momentos les encantan y, desde meses antes, ya están deseando hacer sus planes.
Aunque sea lo mismo y repetitivo, siempre es único y, si te fijas, siempre encuentras diferencias para recordar.
Algún año correré esta p*#% carrera, ¿lo lograré? Lo tengo de propósito y que sepáis que no se me resiste nada, hasta he aprendido a esquiar (bueno, aprender, aprender...).
Ya os contaré lo del tema esquí, que ha sido muy grande.
Ayns, madre 40 en 2017. Niña no eres consciente del peazo de Guateque que vas a marcarte, tendremos que hacer una fiesta.
Si por eso nuestros Ramos son Por Siempre Jamás.
Porque si lo de Siempre es bueno, si no quieres, no tienes porque cambiarlo.
Un besete soletes.
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