jueves, 1 de diciembre de 2016

Plan de un día con niños en Madrid por Navidad o en Puente.

Me llevo cada bronca últimamente que no es ni medio normal. El año pasado os conté planes navideños y me dijísteis que este año os los contara con antelación por si os apetecía. Y yo aquí, a sus órdenes.

Más actual no se puede, no voy a poder hacer nada el puente, sólo currar. Así que, os cuento el plan que hicimos este pasado domingo.

Nosotros aparcamos en el parking de las Descalzas, nuestros planes son de no movernos de la zona. Aunque si pensáis ir esta semana del puente, tened en cuenta el tráfico por los cortes que va a haber, quizás tengáis que llegar en transporte público.

Nada más salir del parking te encuentras con el Cortilandia y este año es de Ratones, así que fue perfecto por nuestro plan secreto (nunca le cuento qué hacemos ni en el último momento).


Lo primero que teníamos que hacer era sacar las entradas para la Casa Museo del Ratón Pérez de la Calle Arenal 8 (está casi llegando a la Puerta del Sol). Era la tercera vez que intentábamos entrar, por unas cosas u otras fue imposible entrar en las 2 anteriores. La entrada sale por 3€ y hay que comprarlas allí in situ, no puedes hacer online, pero puedes llamar antes de ir y preguntar si hay huecos libres; nosotros fuimos a las 12 de la mañana y nos dieron para las 18:20.

Y encontrárnoslo, nos emocionó.



Tras comprar la entradas, nos fuimos a la Plaza Mayor de "Madriz" a dar una vuelta viendo los puestos navideños. Como podéis ver, podías mirar y mirar sin tener cuatro filas delante y, entre paraguas y charcos, estábamos encantados.



Elegimos un gorro divertido (que al final terminé por no comprar por despiste, en fin...) y tambié una figurita para el Belén.


Un bocata de calamares en la Plaza Mayor me enchufaba mucho como plan, pero tenía reserva en El escarpín; está fenomenal de precio, muy bueno todo y al ladito de nuestro plan, en la Calle Hileras 17. Llama antes si sabes o quieres ir porque suele estar petao. Tomamos por antojo fabes, cachopo, arroz con leche, flan y bebidas, 50€ los 3. También queríamos callos, morcilla, mejillones, pero me resistí.
Ojo, la foto no hace justicia al tamaño del bicho que nos tomamos.



Quería haber ido a dar un paseo por la Palacio y explicarle a Hugo cuál era mi despacho y cómo veía al Rey desde mi ventana, pero estaba llovizneando. En la misma calle vimos el puesto de Libros que más me gusta de Madrid y, en vez de ir a la Casa del libro o a la Fnac a hacer tiempo, cambiamos de plan; de nuevo, cosas del tiempo y buscar opciones rápidas.


Ya sabéis lo que nos gustan los súper héroes y los Legos, así que nos fuimos al Corte Inglés una hora a que viera in situ qué le podía pedir a los Reyes Magos. Aunque tenemos trillado el catálogo desde hace un mes, mola más verlos en directo.


Ya parece que nos iluminamos algo más con el tema y nos quedó clarinete qué tenemos que pedirle a sus majestades.



Nos moló mucho el tema luces, que cada una nos recuerda a algo, nos paseamos hasta Sol para ver el mega árbol y el reloj de las Uvas.


Ya en hora, nos fuimos a la Casa de Pérez y nos encantó, la verdad. Hugo la definió como increíble. Pero bueno, ya sabéis nuestros criterios... ha visto a "Nessy" en el Lago de Sanabria y en el de Embalse de Valmayor (está por allí de vacaciones).



Firmamos en el libro del Ratón y no os sacamos fotos del interior por estar prohibido y por no romperos la sorpresa por si os acercáis. Es un pequeplan, pero me encantó. Me encanta la magia.


Nos compramos el libro de Pérez y ya lo hemos acabado.  


Al terminar la visita, nos fuimos a merendar a San Ginés. Personalmente no me convence, aunque puede molar ir por la tradición, no me gusta ese tipo de chocolate tan harinoso, soy más del chocolate de 1902, la chocolatería artesana. Por suerte había mucha cola y el Pichu no quiso esperar, así que nos fuimos a la que me mola a mí.



Aunque estábamos a reventar después de la comilona, decidimos salir rodando y Hugo y yo pedimos chocolate con churros. Y me lo acabé tan ricamente, vamos, un chocolate y medio y rebañando. Para mí el mejor chocolate del mundo.


Está al lado del parkingy, después de hacer el ganso, nos fuimos a casita a ducharnos y a descansar un poquito.



Y colorín colorado, otro plan que os hemos contado.

Ya sólo nos quedan 6 cosas por hacer estas Vacas de Navidad. Sí, ya las tengo planeadas.

Un besi Guapis,
Luna.

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