Déjales hacerlo...

Este finde es uno de esos, que no sabes si va a nevar o vas a salir en canoa de casa, pero lo que está claro es que te vas a quedar pajarito total.

Me priva, me encanta. Esto, sin duda, es lo mejor del cole, al menos para Hugo.

Ya sé que muchos lo consideráis un acto de imprudencia, inmadurez, ridiculez y todos los Ez que se os ocurran.

Y la bronca que me va a meter mi madre en cuanto vea el post va a ser fina, ¡su nieto pillando frío y que le lleve una pulmonía para el otro barrio o cosas peores!
"Sí, mamá, estaba encharcado hasta las cejas". (Di que sí Lunita, tú echa más leña al agua, digo, al fuego).

Pero qué le voy a hacer, me encanta y a Hugo más aún, claro. Soy bastante rígida en muchas cuestiones referentes a su educación, pero luego tengo otras que hacen que me sienta genial y a él le pirran. Así que nos calzamos las botas de agua y a divertirnos, ¡yuujuuuuu!

Podíamos habernos bañado dentro de las botas en vez de hacerlo en la bañera y pasarnos otro rato genial entre pompas y otras cosas de agua.

Los genijos los quitamos en Primavera, pero ahora los regamos tan ricamente con el agua recogida, somos ecosostenibles porque reciclamos el agua de lluvia, jajaja.

Besos.