A Hugo, un día de esos nuestros del Calendario de Adviento diferente le tocó ayudar. Como hemos hecho el cuento de Navidad en el Teatro de papás y mamás del cole, pues este día él tenía que ayudar y no ser egoísta, es Navidad y hay que aprender la satisfacción que se logra haciendo también cosas por los demás.
No, lo siento, Hugo sabe cosas buenas, malas, se frustra, tiene que obedecer, tiene que ayudar y ese tipo de cosas que hacemos las madrastronas y que os cuento casi en vivo y en directo a cada rato en nuestro Facebook.
No, lo siento, Hugo sabe cosas buenas, malas, se frustra, tiene que obedecer, tiene que ayudar y ese tipo de cosas que hacemos las madrastronas y que os cuento casi en vivo y en directo a cada rato en nuestro Facebook.
Teníamos que llevar a un banco de alimento zumos y quería que los días anteriores estuviera inmerso en el tema. Le pregunté si el día de mañana le tenían que ayudar con comida porque sus padres no pudiéramos dársela, si no le gustaría recibir al menos un zumo chulo que le hiciera sonreír.
La respuesta muy triste fue sí, así que me ayudó y sin protestar. Varias tardes pintando botones, narices y decidiendo los pompones y los limpia pipas brazos a poner en sus muñecos de nieve.
Un folio blanco, un trozo de cinta pegada como si fuera bufanda, un poco de cartulina cortada como una chistera y un poco de rotu (negro para botones y ojos, y naranja para nariz) y, como teníamos tiempo, pues pusimos los pompones.
También llevamos unos bizcochos molones de Navidad, los mismos que hicimos para su clase el día de la Asamblea; estuvo conmigo echándome también una mano. El bizcocho es de naranja, bajo en grasa, esponjoso, sin mucho azúcar y que a Hugo le encanta.
Los pompones y limpiapipas 1,50€ en Praimark. Por el precio, merecía la pena dejarlos bonitos todos.
Es otro modo de no aburrirse con los zumos o sorprender cualquier día con una merienda genial, para los cumples o para llevar de detalle al cole o la guarde.
¿Os acordáis de los que llevamos otra vez al cole? Pues eso, ideas sonrientes.
Ojalá nunca nadie necesite los bancos de alimentos.
Ojalá nunca nadie necesite los bancos de alimentos.
Mañana os cuento con calma la otra cosa solidaria que haremos estas Navidades, pero por ir abriendo boca y por si queráis ayudar (y reíros un po de mí), el próximo lunes 22, a las 19:00 en la Casa de la Cultura de Valdemorillo, actuamos para ayudar: Un cuento de Navidad "diferente". Además, al día siguiente no hay cole y podéis cenar algo o picotear por la sierra o ir al Escorial a comer y ver el Belén viviente increíble y luego pasáis a vernos. El precio es simple: lo que podáis o queráis dar.
Pues eso, sólo hacer falta dar las gracias
Besos.
Gracias por estos post tan bonitos que nos regalas, una pena que viva en Valencia porque me encantaría verte, y aunque te cueste lo haces genial con Hugo.
ResponderEliminarBesos a los dos por vuestro esfuerzo.
Jo que bolloooo, me siento por vista en el teatro,....creo que nunca se sabe cuando se puede necesitar y estas fechas son perfectas para ser agradecido, para ayudar e intentar cositas, que aun que sean duras, es Navidad, son unos días para dejar de lado los problemas e intentar que sucedan cosas que nos hagan olvidar lo malo, es parte de la magía de la Navidad
EliminarHugo tiene que ser persona y dejar de tener unos días sus cosas, sus egoismos y dar algo, ayudar con lo que pueda, entendiendo lo que significa tener tanta suerte como tenemos y valorar,....
Pero qué creativa eres, hija!! A mi me dejas anonadada con las cosas que te veo hacer por aquí... y me apunto todas las ideas, para copietearte. En este caso, si encima es por una causa solidaria, le pones la guinda al pastel. Enhorabuena!
ResponderEliminarBesitos!
Son chorrainas que me ayudan a engañar a Hugo con los zumos,.....y si tenemos que ayudar y hacer cumples chulos, pues mola ¡¡¡
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